Esta obra maestra de la arquitectura del siglo XIX fue construida por Charles Garnier a petición del emperador Napoleón III. Se ubica en la Place de l'Opera, una plaza en el Distrito IX de París.
El interior de la Ópera Garnier hace alarde de contar con una asombrosa arquitectura Beaux-Arts (por ejemplo, la Gran Escalera de mármol de 30 metros de altura). Su intrincado interior inspirado en la novela de Gaston Leroux de 1910 El fantasma de la ópera (y el súper exitoso musical de Andrew Lloyd Webber), la convierten, probablemente, en la ópera más famosa del mundo.