1. Lago de Sol y Luna
El lago de Sol y Luna, cuyas vistas son tan místicas como su nombre, es uno de los lugares más asombrosos y la masa de agua más grande de Taiwán. El lago, que recibe su nombre de su distintiva forma, está rodeado de preciosas montañas y es el hogar de las últimas comunidades aborígenes de Taiwán.
No es de extrañar que el lago atraiga a tantos turistas, ya que es perfecto para explorar. Cuenta con una enorme red de rutas de ciclismo en el perímetro, teleféricos que sobrevuelan el lago para poder ver su forma con vistas de pájaro y muchos cruceros turísticos.