Construido en el transcurso de 500 años e influenciado por el califato de Córdoba y reyes cristianos, el estilo arquitectónico del Alcázar es muy diverso. A pesar de ello, un motivo prevalece: la belleza.
Además de sus jardines tropicales y sus magníficos patios, el palacio es notable por sus retablos de azulejos, que sirven como marcos para los tapices. Admira todo esto por ti mismo con una entrada programada que te permitirá saltarte las largas colas.
Arcos de influencia árabe, ornamentados techos que te dejarán sin palabras e innumerables pabellones te esperan en este inmenso complejo palaciego.